El presente proyecto tiene como objetivo principal fomentar el amor y cuidado de la casa común en nuestras niñas. Desde un enfoque ambientalista, con experiencias vivenciales y en espacios naturales de nuestro colegio ellas pudieron sentir que son parte del medio en el que se desarrollan, lograron tener empatía con los seres vivos y tuvieron el deseo innato de preservarlos.
En las actividades realizadas aprendieron sobre las partes de las plantas y los cuidados que necesitan para crecer, descubrieron sus colores, olores, texturas y observaron las semejanzas y diferencias entre ellas.
Elaboraron una regadera con material reciclado con ayuda de sus padres y tuvieron la oportunidad de explorar y manipular la tierra para luego, sembrar diferentes alimentos con la compañía de un experto invitado (jardinero) que estuvo durante todo el proceso y absolvió sus interrogantes.
Durante cuatro meses cuidaron de sus plantas y trabajaron en equipo para recordar las recomendaciones para su cuidado. Posteriormente cosecharon y usaron los productos para preparar una deliciosa ensalada.
Finalmente, es preciso señalar que el contacto con la naturaleza propició su capacidad de asombrarse, descubrir y valorar la vida.